Descubre con qué facilidad puedes tener un estanque en tu casa, jardín, patio o terraza. Te guiamos paso a paso para que construyas ese ecosistema en miniatura repleto de vída, animales y plantas.
¿Qué es un estanque?
En sentido estricto, un estanque no es más que una cavidad en el terreno que retiene el agua. En la naturaleza, esto puede suceder por tratarse de un terreno arcilloso, una oquedad rocosa e impermeable o porque el nivel del terreno está por debajo de la capa freática. Un estanque es un ecosistema acuático que tiene asociado una serie de fauna y flora particular.

¿Cómo se hacían los estanques en la antigüedad?
Antiguamente, hacer un estanque era difícil. Primer había que encontrar el sitio adecuado, una depresión en un terreno con un porcentaje de arcilla bastante alto. Se hacía un agujero y a continuación se echaba una capa de ceniza para evitar que las lombrices agujerearan la arcilla cuando estuviera puesta. Luego había que cubrirlo con una capa de arcilla mezclada con agua para impermeabilizarlo. Finalmente se llenaba de agua, quizás desviando una fuente o un arroyo. Cuando el nivel del agua bajaba, había que mojar la arcilla que quedaba al descubierto para que no se secara, cuarteara y terminara filtrando. Además, las raíces de los árboles y arbustos de los alrededores podían agujerearla. Era un trabajo laborioso y requería un mantenimiento constante.
Tipos de estanques según su material. Ventajas e inconvenientes
Afortunadamente para los amantes de la naturaleza y de los jardines, hacer un estanque artificial en tu casa es muy fácil. Puedes elegir entre uno de estos tres métodos para hacer tu estanque:
Estanques de lámina de PVC
La impermeabilización se consigue mediante una lámina de PVC pensada específicamente para la construcción de estanques. Su grosor varía entre 0,5 y 2,5mm.
Ventajas
- Es elástico y resistentes a la perforación.
- Es químicamente neutro y resiste los rayos ultravioleta
- Resiste la intemperie sin estropearse aunque quede expuesto al sol. Normalmente vienen con una garantía de 10 años.
- Impermeabilidad asegurada
- En caso de que se agujeree, son fáciles de parchar.
- Gran variedad de tamaños
- Instalación sencilla y barata
Inconvenientes
- Casi siempre son negros, que no es un color muy bonito para un estanque, aunque también los hay verdes.
- Al ser una lámina de PVC, puede perforarse por accidente.

Estanques prefabricados
Son estructuras de polietileno semirrigido. Solo tienes que comprar el estanque sintético con la forma que más te guste, hacer un agujero, colocarlo y rellenar de agua. Existe una oferta y variada gama de estanques de jardín prefabricados con muchas formas y tamaños para elegir en las tiendas online.
Ventajas
- Son muy resistentes, tanto a la intemperie y a los rayos de sol como a los golpes y las perforaciones.
- Son perfectamente impermeables.
- Podemos encontrarlos en imitación a piedra, además de los típicos verdes y negros.
- Variedad de formas y tamaños para elegir, hasta unos 1.800 litros.
- Una buena solución para jardines pequeños.
- Aunque no son muy baratos, aun pueden encontrar buenos precios.
Inconvenientes
- Tenemos que ajustarnos exclusivamente a las formas y tamaños comerciales
- Tamaño y profundidad limitados
- Una incorrecta instalación, con la tierra de los alrededores mal apisonada, puede hacer que se deforme.
- El espacio reservado para las plantas suele ser muy pequeño.
Estanques de hormigón
Los estanques de hormigón o cemento son estanques de obra.
Ventajas
- Si se trata de un estanque grande y necesitas llegar al centro para labores de mantenimiento de las plantas, puedes caminar por él sin temor a que se agujeree.
- Los estanques de hormigón bien construidos pueden ser eternos.
Inconvenientes
- Con el paso del tiempo pueden producirse microfisuras que dañen la impermeabilidad
- Su construcción es complicada y requiere de conocimientos de albañilería o bien contratar los servicios de especialistas.
- No son nada económicos, más bien todo lo contrario.
Bombas y filtros para estanques
Aunque no son estrictamente necesarias, las bombas son muy útiles y beneficiosas para los estanques de jardín ya que mantienen el agua en movimiento ayudando a crear un sistema equilibrado, además pueden tener elementos filtrantes.

Otros accesorios para el estanque
Puedes encontrar en las tiendas online especializadas multitud de ofertas en accesorios y elementos decorativos que enriquecerán tu estanque.
Cascadas y arroyos
Si has decidido comprar una bomba, puedes aprovecharla para crear una cascada o un pequeño arroyo. Puedes realizarla tú o comprar los módulos prefabricados que venden en las tiendas online.
Fuentes y surtidores
También puedes optar por bombas que incorporan un surtidor que proporciona un atractivo chorro de agua en el centro del estanque
Puentes y muelles
Si el estanque tiene suficiente tamaño, puedes decorarlo con un puente o un muelle que le aportará un gran atractivo
Iluminación para el estanque
Cuando los estanques están en zonas de esparcimiento que vayas a usar durante la noche, es buena idea añadirle iluminación sumergida, por ejemplo en la base del surtidor. También puedes optar por iluminación exterior o combinarlas.
Las plantas del estanque
Las plantas son imprescindibles para recrear un estanque de aspecto natural. Tienes muchas donde elegir: flotantes, sumergidas, oxigenadoras, pantanosas… Cada una debe ocupar su lugar en el estanque para contribuir al correcto equilibrio ecológico. Las puedes comprar o bien recogerlas de su hábitat natural siempre que no esté prohibido.
Tipos de estanques según su estilo
Una forma básica de clasificar los estanques es según el estilo paisajístico al que corresponden. Básicamente puedes encontrar dos estilos: el formal y el natural.
Estanques de estilo formal
En este tipo de estanques suelen tener formas geométricas: cuadrados, rectángulos, círculos u óvalos y sus orillas son uniformes, de hierba, de madera, de terrazo…. Pueden estar al nivel del suelo o elevados. En ellos, el elemento principal es el agua, y los animales y plantas acuáticos quedan relegados a un segundo plano. A veces tienen uno o dos grupos de nenúfares o un grupo de espadañas o juncos en alguna esquina pero incluso llegan a carecer de plantas. Lo que se busca es una superficie de agua quieta que refleje el entorno como un espejo. Son propios de los jardines que responden al también al estilo formal, y suelen reflejar las formas simétricas de dichos jardines.
Este tipo de estanques nació en Grecia e Italia ante la necesidad de contar con reservas de agua para regar los cultivos, pero fueron los romanos los que incorporaron a los jardines de sus villas los estanques de agua como elementos puramente decorativos.
Estanques de estilo natural
En este tipo de estanques se busca un aspecto natural, en el que la forma del estanque y sus plantas se integran con la naturaleza y el agua está poblada de animales. Muchas personas que se inician en el mundo de los estanques creen que los estanques naturales para jardines se consiguen poniendo una capa de tierra sobre el fondo impermeable y dejando que las plantas crezcan libremente. Pero este sistema no suele dar buenos resultados, pues las plantas crecen invadiéndolo.
El secreto de los mejores estanques naturales es que lo parecen pero no lo son. En realidad todo está distribuido con una determinada intencionalidad y bajo control. Se deben emplear materiales duraderos, plantas poco invasivas y cultivadas en tiestos especiales para estanques.
Los estanques grandes
Un estanque grande requiere lógicamente de un espacio aún mayor. Están reservados para los grandes jardines y parques. Suelen estar rodeados de árboles grandes, césped y macizos arbustivos. Muchas veces decorados con rocas, cascadas y otros elementos de aspecto natural. Dado su tamaño, pueden albergar una gran cantidad de fauna sin problemas, que incluye aves acuáticas, peces y tortugas y mantienen solos el equilibrio ecológico.
Los estanques pequeños
Son adecuados para los jardines de pequeño tamaño. Puede hacerse un estanque casero con los métodos que hemos visto, pero también se hacen aprovechando cubas, pilas, grandes macetas y otros recipientes que se adaptan de forma artesanal y que son muy adecuados para patios y terrazas. Normalmente no pueden soportar la presión de los galápagos, a los que les encanta escarbar y revolverlo toso y terminarían levantando y arruinando las plantas.